Empezamos cortando todos los ingredientes para tenerlos preparados en el momento de utilizarlos. Empezamos con la cebolla, la cortamos a dados pequeños de aproximadamente medio centímetro, laminamos el diente de ajo y cortamos los champiñones del mismo tamaño que hemos cortado la cebolla. También podemos cortar el lomo de salmón a cubos pequeños. Reservamos todo.
A continuación lavamos el calabacín y lo cortamos por la mitad (corte transversal). Colocamos el calabacín a lo largo de la tabla y empezamos a pelarlo de lado a lado con un pelapatatas para hacer láminas, intentando sacarlas enteras y que no se nos rompan. Cuando lleguemos a la parte de las pepitas podemos cambiar de posición y empezar el proceso de laminado de nuevo por el lado opuesto. Repetimos el proceso por las partes que podamos hasta que nos quede solo el centro del calabacín. Esta parte no la vamos a desechar, la cortamos a cubitos pequeños y la reservamos para cocinarla con el resto de verduras.
Las láminas de calabacín que hemos obtenido las ponemos en un recipiente para cocinarlas al vapor. El tiempo que se tienen que cocinar al vapor es de 3 minutos. Una vez las tengamos listas, apartamos el cazo del fuego y las reservamos para más adelante.
Ponemos una sartén a fuego bajo y sin aceite añadimos la cebolla y el ajo que teníamos cortados. Cocinamos a fuego lento para que no se queme la cebolla. Pasados 7 minutos o cuando veamos que la cebolla empiece a dorarse añadimos los cubitos de calabacín que teníamos reservados. Ahora podemos aumentar el fuego a medio, ya que el calabacín es una verdura que tiene bastante agua. Volvemos a mover y mezclar todo y lo cocinamos hasta que veamos que el calabacín ha disminuido su volumen. Luego añadimos los champiñones y los salteamos junto a toda la mezcla por 5 minutos más. Finalmente añadimos las espinacas frescas que cocinaremos por 2 minutos, ya que no necesitan mucho tiempo de cocción.
Añadimos a la sartén la crema de soja, removemos y la integramos bien con las verduras por unos 5 minutos más. Por último añadimos los dados de salmón, que dejaremos cocinar por 5 minutos mientras se integra con la crema y las verduras. Espolvoreamos el eneldo por encima del guiso y apagamos el fuego. Ahora sólo nos queda preparar nuestro plato.
Mi sugerencia es poner sobre la base del plato las láminas de calabacín como si fuera pasta y por arriba repartir la salsa con las verduras colocando finalmente el salmón por arriba. ¡Ya lo tenemos!