Empezamos precalentando el horno a 190 grados centígrados con calor arriba y abajo. Cuando alcance la temperatura colocamos la patata en una bandeja a una altura media y la dejamos que se hornee por 40 minutos. Podemos envolverla con papel de aluminio para que se cocine en su propio vapor con menos probabilidad de que se queme. Pasado este tiempo y antes de sacarla, pinchamos con un palillo para comprobar que está cocinada en todas sus partes por igual. Lo ideal es que esté tierna por dentro, pero no demasiado, para que disfrutemos de su textura cremosa.
Mientras se hornea, sobre una tabla de cortar vegetales cortamos la cebolla a dados muy pequeños, laminamos el ajo en cuatro partes y reservamos todo.
Ponemos una sartén a fuego medio y añadimos una cucharada de aceite de oliva. Cuando empiece a coger temperatura añadimos la cebolla junto con el ajo y sofreímos. Vamos moviendo. Salpimentamos y continuamos cocinando el sofrito hasta que la cebolla tenga un color transparente. Ahora, añadimos la carne picada a la sartén. Le añadimos un poco más de sal, pimienta, hierbas provenzales y pimentón dulce. Con un utensilio de madera vamos moviendo todo para que se integre y a la misma vez vamos desmenuzando la carne. Cocinamos hasta que se dore un poco. Por último añadimos el tomate frito, mezclamos y calentamos por unos minutos más. Apagamos el fuego y reservamos la mezcla en la sartén.
A continuación sacamos nuestra patata del horno y la ponemos en el plato que vayamos a servir. Le hacemos un corte a lo largo y la abrimos con cuidado ya que aún estará caliente. La vaciamos con una cuchara dejando sólo una capa fina de patata y pasamos a rellenarla con la carne picada que tenemos preparada en la sartén.
La patata sobrante, tanto de la otra mitad como la que hemos vaciado, la reservamos en un bol y con ayuda de un tenedor la picamos. Añadimos un poco de sal, pimienta negra y un chorrito de leche semidesnatada. Picamos y mezclamos todo con el tenedor hasta formar una masa homogénea.
Cogemos una manga pastelera, la rellenamos con la crema de patata y sobre la boloñesa dibujamos unos conos. Podemos espolvorear un poco de perejil picado. ¡Buen provecho!