Vamos a empezar primero a preparar la quinoa ya que es el ingrediente que necesita más tiempo para su cocción.
Ponemos un cazo con el caldo de verduras a fuego medio. Mientras alcanza temperatura lavamos la quinoa. Para ello cogemos un colador/ escurridor (que no deje pasar el grano de la quinoa) y la remojamos bajo el grifo con abundante agua. Una vez bien lavada, la reservamos.
Cuando el caldo de verduras del cazo esté hirviendo añadimos la quinoa y le espolvoreamos un poco de pimentón picante.
Para hervir bien la quinoa y que se absorba todo el caldo de verduras necesitaremos el doble de cantidad de caldo que de quinoa exactamente, es decir, por cada vasito de quinoa necesitaremos dos vasos de caldo de verduras.
Dejamos hervir la quinoa el tiempo estimado, normalmente son 13 minutos, pero dependiendo de la variedad de ésta puede variar su tiempo de cocción. Una vez pasado el tiempo, apagamos el fuego y dejamos reposar en su cazo.
Mientras, sobre una tabla de cortar vegetales, lavamos muy bien las espinacas y las secamos. Hacemos lo mismo con los champiñones y una vez lavados, los laminamos. Laminamos un diente de ajo y reservamos todo.
Ahora ponemos una sartén a fuego medio, añadimos el aceite de oliva y cuando empiece a coger temperatura añadimos el diente de ajo. Movemos un poco para que no se nos tueste, añadimos las hojas de espinacas frescas y salpimentamos. Seguimos moviendo y cuando pierdan volumen o pasados unos 5 minutos añadimos los champiñones. Éstos los cocinamos por unos 10 minutos o hasta que se evapore toda el agua que han soltado en la sartén.
Cuando tengamos las verduras sólo nos quedará montar el plato. Nosotros hemos utilizado un círculo de cocina para darle un formato más llamativo, pero tú puedes hacerlo como quieras, incluso mezclarlo todo en la sartén y servirlo. ¡Espero que lo disfrutes!