Tortilla de berenjena y ajos tiernos
¿Sabíais que las berenjenas son originarias de países de oriente? A día de hoy está muy presente en nuestra dieta y ¿Por qué no cocinarla en tortilla?
¿Sabíais que las berenjenas son originarias de países de oriente? A día de hoy está muy presente en nuestra dieta y ¿Por qué no cocinarla en tortilla?
¿Sabíais que las berenjenas son originarias de países de oriente? A día de hoy está muy presente en nuestra dieta y ¿Por qué no cocinarla en tortilla?
Preparamos una tabla para cortar vegetales. Lavamos y cortamos los ajos tiernos a rodajas de 1 centímetro, desde la parte de las raíces hasta la parte verde sin llegar a trocear la parte más dura de éstos. Esa parte, la desechamos. Los reservamos en un bol.
Lavamos bien la berenjena y la troceamos a bastones. Sobre un plato extendemos los bastones, espolvoreamos sal gruesa y cubrimos con un trapo. Lo dejamos así por 15 minutos. Una vez pasado el tiempo, lavamos con agua las berenjenas para quitarle la sal y con ayuda de papel de cocina las secamos quitándole el resto de agua. Las reservamos.
Ahora sobre un bol, cascamos tres huevos frescos y retiramos dos de las yemas. Así nos quedarán tres claras y una yema para nuestra tortilla. Batimos apenas los huevos, es importante que no llegue a hacerse espuma para así conseguir una tortilla más jugosa. Salpimentamos.
A continuación preparamos una sartén a fuego medio. Añadimos una cucharada de aceite de oliva, dejamos que coja temperatura y salteamos los ajos tiernos por 10 minutos o hasta que estén doraditos. Los cocinamos moviéndolos por momentos para que no se nos tuesten demasiado rápido. Una vez los tengamos, los vertemos sobre el bol de los huevos.
Ahora salteamos las berenjenas hasta que estén blanditas y a la misma vez tostaditas. Una vez cocinadas, las añadimos al bol junto con los huevos y los ajos tiernos. Mezclamos con un tenedor para que se integren todos los ingredientes y vertemos la mezcla sobre la sartén de nuevo y sin añadir aceite.
Cocinamos todo a fuego bajo. En los primeros momentos de cocción podemos hacer unos movimientos circulares como si fuéramos a hacer un revuelto en el centro de la sartén con la espátula, para así ayudar a que se cuaje la mezcla de forma homogénea. Luego, la dejamos que se cocine por unos cinco minutos o cuando veamos que la mezcla esté cuajada y aguante su peso para poder darle la vuelta a la tortilla, con cuidado y de manera decidida con un plato que encaje en el diámetro de la sartén. La devolvemos a la sartén y la cocinamos por 5 minutos más. Y listo, este plato se puede servir caliente o frío, ¡Cómo más te guste!